Recuperación de variedades

La pérdida de diversidad agrícola es un problema creciente que, con frecuencia, pasa desapercibido para gran parte de la sociedad. Es una consecuencia directa de la enorme transformación que ha experimentado la agricultura en las últimas décadas. La búsqueda de mayores rendimientos y la demanda de productos estandarizados han impulsado la adopción de unas pocas variedades, en detrimento de muchas otras, tradicionales y de uso local, que poco ha poco van desapareciendo.

Los árboles frutales no son ajenos al problema planteado. Sin embargo, el hecho de tratarse de plantas que viven bastantes años, hace posible que aún puedan encontrarse ejemplares aislados de variedades poco habituales hoy día en las plantaciones comerciales.

Las variedades antiguas no solo representan un patrimonio natural que per se merece ser conservado. Suele tratarse de variedades bien adaptadas a las condiciones locales en que se han obtenido y utilizado, y a menudo se muestran más resistentes a plagas y enfermedades que las variedades modernas. Constituyen por tanto un recurso genético fundamental para la agricultura.

Desde la Asociación de Productores y Comerciantes del Valle de las Caderechas somos conscientes de la importancia de conservar este patrimonio, y hemos querido colaborar mediante la puesta en marcha de este proyecto.

Objetivos del proyecto

  • Identificar y poner en valor las variedades de frutas tradicionales o antiguas producidas en las áreas Red Natura 2000 del territorio del grupo de acción local Adeco Bureba.
  • Recuperar, a través de esta web, los conocimientos tradicionales asociados a estos productos para ayudar a su conservación, y a su vez ponerlos en valor mediante ferias y otros eventos.
  • Proponer alternativas a los cultivos convencionales mediante otros que, gracias a su rusticidad, necesitan menos cuidados y pueden calificarse de más “sostenibles”. Algunos, además, son susceptibles de una transformación artesanal para la elaboración de mermeladas, licores, etc.
  • Difundir prácticas de uso sostenible del terreno, que pueden servir para facilitar la incorporación de nuevos agricultores al campo y fijar población en el medio rural.

Fases del proyecto

  • Trabajo de campo de localización e identificación de variedades antiguas: visitas, entrevistas, reuniones…
  • Clasificación y catalogación de aquellas variedades que puedan mostrar mayor interés.
  • Prueba y replicación de muestras del material encontrado y considerado útil, mediante injertos en tres parcelas de la zona.
  • Exposición de los productos obtenidos en las ferias de cereza y manzana reineta del Valle de las Caderechas, para comprobar su aceptación por parte del público.
  • Posibilidad de colaboración con el ITACyL de la Junta de Castilla y León, para la conservación del material encontrado y su puesta a disposición del público.

Trabajos realizados

El proyecto incluye la creación de este sitio web, que pretende servir como medio de difusión de los principales resultados. Al igual que el proyecto, la web tiene vocación de continuidad en el tiempo.

Para cada variedad de interés identificada, se publica en la web una ficha que muestra sus principales características. Desde el sitio también se accede a un sistema de información geográfica (SIG) donde se podrá consultar, entre otros datos, la ubicación de cada árbol identificado.

Uno de los principales medios de difusión lo constituye la exposición de la fruta en ferias alimentarias, para su degustación. Hasta el momento se ha llevado a cabo en tres ocasiones, con motivo de la celebración de las ferias de cereza y manzana reineta del Valle de las Caderechas, con gran aceptación por parte del público. Para algunas de las variedades también se ha llevado a cabo un análisis físico-químico en laboratorio.

Finalmente, y quizá sea esta la labor más importante, cuando ha sido posible se ha muestreado el material vegetal para su conservación y multiplicación mediante injerto en tres parcelas seleccionadas. En otros casos se ha procedido al menos a identificar los árboles in situ y a registrar su ubicación exacta. Se trata de evitar la pérdida de este patrimonio natural que constituyen las variedades tradicionales.